El crecimiento de las economías confirma una perspectiva favorable para los bancos latinoamericanos, según Moody’s

Moody's predice que los bancos latinoamericanos se verán favorecidos por las economías crecientes de Brasil y México.

Moody’s ha afirmado su calificación para los bancos latinoamericanos con una perspectiva estable, citando el repunte de la actividad económica.

El crecimiento económico en aumento, combinado con la estabilidad política, es probable que impulse el crecimiento de los préstamos, declaró la agencia en una nota a los inversionistas.

“El crecimiento económico estable ayudará a respaldar el entorno operativo de los bancos latinoamericanos, manteniendo a raya los préstamos problemáticos en la mayoría de los países”, dice el vicepresidente de Moody’s, Felipe Carvallo.

“Los costos crediticios contenidos, la gran eficiencia y el mayor crecimiento de los préstamos respaldarán la rentabilidad y el capital. Además, la amplia financiación de depósitos básicos proporciona una base sólida para el crecimiento de los préstamos y aísla a los bancos de la volatilidad del mercado”.

Según su informe, la economía brasileña se está recuperando rápidamente de años de lento crecimiento y recesión. Sin embargo, Argentina continuará sufriendo con una alta inflación y un PIB en disminución.

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Además, la dependencia en el mercado y la financiación en moneda extranjera seguirá siendo baja, dice la agencia de calificación.

“El aumento del PIB en la región mejorará el empleo, la actividad corporativa y la demanda interna, por lo tanto, aumentará la demanda de préstamos corporativos y de consumo”, agregó la agencia.

Tanto México como Brasil han elegido nuevos presidentes este año. Los inversores son particularmente positivos sobre la estabilidad política en Brasil. Esperan que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) ayude al nuevo presidente de México a poner la economía en orden.

La disminución del valor de los productos básicos, como el petróleo y los minerales, ha afectado a algunas economías, incluido Brasil. Sin embargo, es probable que la mayor economía de la región crezca un 2,5% en 2018, en comparación con un pronóstico promedio anterior del 2,3%. Las bajas tasas de interés y la inflación están alimentando el gasto.

Los analistas dicen que muchos países en la región pueden acelerar el crecimiento económico si los gobiernos logran enfrentar la deuda pública y recortar el gasto social.