Argentina permite pagar pasajes de autobús con Bitcoin

Recientemente el Ministro de Transporte de Argentina, Luciano Verardo, declaró que se aceptarían pagos en Bitcoin a través de la tarjeta SUBE para los pasajes de autobús.

Argentina está lentamente abriendo paso a las criptomonedas en medio de la creciente volatilidad en su mercado de divisas. La agencia de transporte público del país ahora ha permitido a las personas pagar los boletos de autobús y tren en Bitcoin.

Según un acuerdo, la agencia ha ingresado con Bitex, un proveedor de servicios financieros impulsado por blockchain, las personas pueden recargar sus tarjetas SUBE (Sistema Único de Boleto Electrónico) con la criptomoneda.

Más de siete millones de argentinos utilizan la tarjeta SUBE para viajar en autobuses y trenes, y el servicio está disponible en hasta 37 ciudades importantes de todo el país.

Hasta el mes pasado, los pasajeros podían comprar divisas para esta tarjeta inteligente a través de PayPal. Se dice que una nueva empresa de tecnología fintech RapiPago también planea ofrecer un servicio de pago digital para la plataforma SUBE.

Los ciudadanos argentinos tienen libre acceso para recargar las tarjetas SUBE, único método de pago, en varios puntos autorizados a nivel urbano.

Luciano Verardo, director del Ministerio de Transportes de Argentina, ha declarado que las criptomonedas crearán “nuevas posibilidades de inclusión financiera”, según los medios locales.

Los cajeros automáticos (ATM) que compran y venden bitcoins están aumentando en número en todo el país desde que Athena Bitcoin, una compañía estadounidense, lanzó un cajero automático en Buenos Aires el año pasado. Posteriormente, Odyssey Group, otra firma estadounidense, prometió 150 cajeros automáticos.

Las criptomonedas no son confiables y son vulnerables a las fluctuaciones volátiles. Más que nada, no están respaldadas por los bancos centrales. Por ello, es posible que muchas personas aún no se incorporen al uso de estas “nuevas” tecnologías.

Sin embargo, Argentina y Venezuela utilizan cada vez más las criptomonedas. Con una alta inflación y problemas económicos que hacen que sus monedas sean extremadamente volátiles e inestables, aun más que el Bitcoin.