El banco Santander continúa con un proceso de transformación digital que apunta a objetivos ambiciosos: ahorrar 1,200 millones de euros. Este ahorro no afectará a los mercados europeos, aseguran los ejecutivos. En cambio, le dará rentabilidad para su expansión en Latinoamérica.
Santander dijo tener un plan para la expansión de su banco digital, Open Bank, a 10 nuevos mercados internacionales para llegar a dos millones de clientes nuevos. Para conseguir esta meta, invertirá 20,000 millones de euros en tecnología durante cuatro años.
Santander, con los ojos en Brasil
Santander apuesta todo en Brasil para conseguir la rentabilidad en Latinoamérica. Brasil es el mercado más que tiene ahora el banco español. Para mantener su presencia en el país sudamericano, Santander planea mantener bajos los tipos de interés en los préstamos que ofrece. De esta manera, se espera mejorar el ROTE (rendimiento del patrimonio tangible) por encima del 20%.
Santander también espera aumentar la rentabilidad en la región de un 20% a un 22%, metas que ha establecido gracias al ritmo y sostenibilidad del crecimiento de los ingresos.
Brasil es el mercado más grande de Santander.
Retos en una región poco bancarizada
Latinoamérica es una región con baja bancarización. El Global Findex 2017 señaló que solo un 54,4% de los adultos mayores de la región cuentan con servicios financieros. Aunque esto representa un incremento respecto a 2011 y 2014, la bancarización se ha desacelerado en los últimos años.
Si bien estos datos señalan que aún hay bastantes posibilidades de expansión, también habla de la reticencia de la población en usar la banca tradicional, lo que será un obstáculo en los planes de expansión de Santander.
Las industrias fintech han contribuido recientemente a la bancarización de América Latina. Países como Brasil y Argentina han llamado la atención por sus emprendimientos como son los bancos digitales o nuevos métodos de pago. En México, ante la baja bancarización, se están desarrollando sistemas de cobro digital para aumentar la inclusión financiera.