Las reparaciones de autos son más sencillas con IA

Una startup brasileña aprovecha el poder de la IA para estimar cuánto costará la reparación de su auto.

La aplicación brasileña Car10 ayuda los clientes a obtener un estimado rápido de cuánto podría costar una reparación de auto, gracias a la ayuda de la inteligencia artificial (IA).

Car10 resuelve un de los mayores problemas de las personas cuando sufren un accidente automovilístico menor: saber cómo reparar su auto.

Entre los periplos que deben pasar las personas para reparar un automóvil está saber a quién llamar, la molestia de recorrer lugares para obtener estimados y la preocupación constante de que con quien sea que trabajen no termine aprovechándose de la ignorancia del cliente.

La startup brasileña Car10 ha creado una aplicación que permite a los clientes tener una mejor perspectiva del daño que sufrió su automóvil. Con esta app, a los usuarios les basta enviar una foto y obtener de tres a cinco estimados de talleres automotrices cercanos que han sido evaluados con anterioridad por Car10 en cuestiones de calidad y confianza. La startup incluso garantiza que realizará una reparación gratuita si el cliente no está satisfecho con ella.

“Quitamos el miedo del proceso, la preocupación de que se van a aprovechar de ustedes”.

José Tafner, director financiero de Car10

Innovación potenciada con IA

La compañía ubicada en Sao Paulo utiliza inteligencia artificial para acelerar el proceso. Ahora, los usuarios pueden tener casi de inmediato al usuario una idea aproximada de un costo estimado de reparación gracias a la adopción de Custom Vision Service de Azure Cognitive Services de Microsoft.

Con el sistema actual, los usuarios que envían una foto reciben una cotización en alrededor de 30 minutos y una hora. Con las nuevas herramientas de IA, Tafner comentó que pueden obtener un sentido general de cuánto podría costar la reparación en alrededor de 30 segundos.

“Se remonta a la necesidad del cliente. Cuando tienes un accidente o choque pequeño, lo que quieres saber es cuánto va a costar”, mencionó Tafner. “La primera necesidad es la velocidad y un cierto nivel de precisión”.

El sistema de IA utiliza un modelo de aprendizaje automático (ML, por sus siglas en inglés) para comparar el daño al auto del cliente con otros ejemplos de daño similar para generar un estimado bastante cercano. Luego, la compañía trabaja con talleres de reparación para obtener ofertas más firmes.

Tal vez el sistema de IA acelere el proceso de cotización, pero no reemplaza el involucramiento práctico que Car10 tiene en garantizar que los clientes se sientan cómodos durante el proceso de reparar su auto.

Tafner comentó que Car10 trabaja con clientes en todo, desde brindar el estimado a agendar la visita e incluso pagar a través de la plataforma digital de Car10. Luego, el cliente tiene la oportunidad de calificar su experiencia y al taller donde se realizó la reparación.

“La parte digital de este trayecto es pequeña. La parte más grande es análoga”, comentó Tafner.

Enfocarse en la calidad

Car10 cuenta con alrededor de 100 mil clientes y trabaja con cerca de 4 mil talleres automotrices en Brasil, que van desde grandes empresas a pequeños talleres familiares. Tafner comentó que en un principio la compañía se enfocó sólo en talleres grandes, por la idea de que eso era lo que el cliente prefería. Pero encontraron que a los clientes no les importaba si el taller estaba en la cochera de alguien o en una oficina elegante.

“Les importa la calidad del servicio”, mencionó.

Car10 inició en 2014 con tres hermanos que antes habían trabajado para el negocio de ajuste de seguros de su padre. Cuando se vendió ese negocio, decidieron utilizar su experiencia en la industria de reparación de autos para sumergirse en el mundo de las startups. Tafner se unió unos años después, luego de décadas de experiencia global en el mundo corporativo. El servicio está diseñado para las personas que pagan reparaciones por su cuenta, en lugar de apoyarse en el seguro de autos.

Desde el principio, el equipo de liderazgo, conformado por cuatro personas, ha dependido en gran medida de la tecnología y los datos. Ejecutan el servicio de nube de Microsoft Azure, utilizan tableros de Power BI y construyeron la aplicación sobre el marco de trabajo .NET.

“A los cuatro nos encantan los datos. De manera constante los utilizamos para mejorar el negocio”, comentó Tafner.

Aun así, Tafner comentó que como pasa con muchos negocios que nadan en datos, puede ser un desafío descubrir qué piezas de datos son útiles.

Un ganador claro: Las fotos de reparaciones de autos. Car10 fue capaz de utilizar esos datos para entrenar al modelo de ML para detectar en automático qué tipo de reparación necesita el auto de la persona y cuánto podría costar a grandes rasgos. Car10 no vende datos de los clientes y protege la información personal a través de las protecciones de seguridad de Azure.

Car10, que ha recibido fondos de inversión para startup de parte de Microsoft, primero comenzó a construir la solución IA cuando la compañía participó en un hackfest de la industria. A pesar de que cuenta con personal de TI, ninguna de las personas que trabajan en Car10 tiene experiencia particular en IA. Azure Cognitive Services está diseñado para que pueda ser utilizado incluso por personas sin un entrenamiento formal en IA.

Expansión a mediano plazo

Ahora, Car10 tiene alrededor de cinco años y espera alcanzar un equilibrio en el próximo trimestre. Tafner comentó que ahora la compañía busca más fondos para poder expandirse a otras área de negocio y, de manera potencial, a otros mercados fuera de Brasil.

Una de las ventajas que ofrece la IA a los negocios es la posibilidad de escalar.

“Lo que podemos hacer para choques de autos lo podemos hacer para otras cosas”, mencionó.

Para Tafner, el pequeño equipo y el rápido ritmo son vigorizantes y esclarecedores. Como en cualquier startup, comenta, la compañía prueba nuevas cosas de manera rápida, comete errores y ajusta – todo mientras trata de llevar el negocio central. Lo compara con la conducción de un auto de carreras.

“Cambiamos los neumáticos mientras el auto está en marcha”, comentó Tafner. “Para nosotros, no hay paradas de pits”.