Cuando las soluciones fallan: los problemas de un mal desarrollo de software

Un funcionario aprovechó la noticia de la desaparición de una joven para promover una app del gobierno que funciona mal.

La tecnología está para solucionar nuestro problemas, pero solo si funciona bien. Esta frase es una verdad de perogrullo. Sin embargo, aún parece que tanto las compañías como los gobiernos no lo tienen del todo claro al momento de desarrollaro soluciones tecnológicas.

Un investigador en Inteligencia Artificial mencionaba en una ocasión que en México, el sistema es un enanito verde que está escondido en las computadoras y siempre se cae. Este comentario jocoso hace referencia a una explicación que los usuarios mexicanos escuchan comúnmente al solicitar un servicio que requiere de una computadora o conexión a Internet: “se cayó el sistema”. 

Esta excusa fue la misma utilizada en las elecciones de 1988, cuando Carlos Salinas de Gortari, el candidato del Partido en el poder, iba abajo en el conteo de votos. De repente, una falla en las conexiones hizo que los resultados dejaran de mostrarse. Cuando volvió la conexión, Salinas de Gortari apareció liderando las votaciones. 

Este tipo de fallas eran de esperarse en un momento en que la tecnología a penas se estaba implementando. Incluso en los países más desarrollados, las fallas tecnológicas son frecuentes. Cuando el telescopio Hubble fue lanzado al espacio en 1990, los investigadores a cargo del proyecto encontraron varios problemas. Las fallas iban desde vibraciones de su estructura que afectaban a la calidad de las imágenes, pérdidas de memoria de las computadoras de a bordo y un defecto en el espejo principal que provocaba que las imágenes del telescopio fueran borrosas. Estos problemas costaron millones de dólares en reparaciones.

Errar es una característica humana, no de los países subdesarrollados. Sin embargo, sí es necesario que tanto los gobiernos comos las empresas tomen en serio la calidad en el desarrollo de sus aplicaciones tecnológicas e inviertan los recursos necesarios para que estas funcionen adecuadamente. Solo de esta manera podrán ofrecer productos que ofrezcan confianza entre los usuarios y no dañen la imagen del gobierno.

Estudio de caso: #TeBuscamosKaren

El martes 3 de diciembre, Karen Espíndola desapareció después de mandarle un mensaje a su mamá, preocupada por el aspecto sospechoso del taxista. Esta fue la cronología de los hechos:

Alrededor de las 8:20 de la noche, Laura Karen envió un mensaje a su mamá para avisar que tomaría un taxi. 

A las 8:58 de la noche, Karen mandó un segundo mensaje diciendo que el chofer de la unidad se veía sospechoso y era grosero.

Esa fue la última vez que la joven tuvo contacto con su familia antes de desaparecer. Su madre pidió que bajara del taxi y mandara su ubicación, pero Laura ya no contestó.

A partir de ese momento familiares y amigos pidieron ayuda en redes sociales. Su hermano, Daniel Espíndola compartió la conversación que tuvo Laura con su madre y una foto.

“No le entran las llamadas, ni los whats. Solo sabemos que prendieron y apagaron el celular. Ella iba vestida como en esta foto, con leggings negros, mide 1.65-1.70”, escribió Daniel.

En Twitter, el hashtag #TeBuscamosKaren se volvió tendencia. Esta difusión hizo que un funcionario compartiera la herramienta “Mi Taxi CDMX”, la cual incluye un botón de pánico para dar aviso a las autoridades de una situación de peligro.

https://twitter.com/PPmerino/status/1202220892308160512

Una solución moderna para un problema creciente en la Ciudad de México. Sin embargo, los usuarios reportan un problema: la App no funciona como debería.

Las quejas no solo han sido de usuarios, sino también de desarrolladores expertos que señalaron varias deficiencias de la aplicación. Uno inclusive simuló la aplicación, mostrando que podría hacerse una mejor y de código abierto.

Una app con un desempeño pobre no solamente ofrece una mala imagen del gobierno, que queda como incompetente. También pone en peligro a los usuarios que están considerándola como una opción fiable en situaciones de emergencia.

Un país con talento que no se está usando

El problema no es una señal de incompetencia por parte de los programadores mexicanos, ni por la falta de herramientas tecnológicas. México es un país que se gana cada vez más la confianza de la industria de desarrollo de software. Empresas grandes y medianas de software han decido establecerse en el país, en parte por su cercanía con Estados Unidos tanto geográfica como culturalmente. Aunque la Ciudad de México es las metrópolis más desarrollado, otras ciudades han ganado prestigio con el tiempo.

El problema es el talento que no se está aprovechando en el país. Y esta situación sucede en varios niveles. En el área de tecnología, el sistema educativo mexicano ha tenido problemas de mantenerse al día. En muchos casos, los jóvenes no encuentran espacio para desarrollarse dentro de las empresas.

México enfrenta muchos problemas. La innovación tecnológica puede contribuir a su solución, siempre y cuando esté bien hecha.